Argentina necesita un plan económico que alinee lo político y la macroeconomía para generar expectativas que alienten el ahorro y la inversión, y los bancos somos fundamentales para facilitar estas decisiones a través del financiamiento a individuos y empresas. Si bien hubo un rebote en el PBI, también aumentó la inflación que, combinada con tasas reguladas, causó una baja en la rentabilidad del sistema financiero en general.
El próximo año será complejo debido a los desbalances macroeconómicos, con alto déficit fiscal, financiado en parte con emisión (que a su vez genera inflación), y con presión sobre los distintos tipos de cambio. Claramente, una mayor inflación perjudica nuestros resultados y el ambiente de negocios en general.
En este marco, es imprescindible que se explicite un plan económico que genere certidumbre a partir de un acuerdo con el FMI. Un acuerdo es condición necesaria pero no suficiente para generar mayor certidumbre sobre el rumbo de la economía, lo que permitiría avizorar un mayor dinamismo de la actividad.
La mejora de las variables macroeconómicas es fundamental para que se recupere la confianza y se incremente el consumo y la inversión y, por lo tanto, la demanda de crédito.
Por nuestra parte, los bancos estamos muy sólidos y líquidos. Tras la cuarentena, la calidad de cartera no sufrió tanto. Para que la demanda de crédito crezca es necesario que mejoren las expectativas económicas en general.
Pandemia y tecnología
La pandemia aceleró el uso de las herramientas digitales y eso crea una enorme oportunidad para el sistema financiero. Operacionalmente, a partir de la inversión en tecnología que hicimos en los últimos años, pudimos atender a los clientes en forma digital en todos los canales y segmentos. Desde mediados de noviembre y por disposición del Banco Central, ya no es necesario asistir a las sucursales con cita previa. Ahora bien, alentamos a utilizar el sistema de turnos, ya que permite agilizar la visita a la sucursal y es beneficioso para el cliente.
En cuanto al negocio, las prioridades pasan por continuar invirtiendo en todo lo que nos permita cumplir con nuestro propósito de mejorar el día a día de las personas. Fundamentalmente, vamos a impulsar la digitalización de los principales journeys para brindar experiencias sin fricción e inmediatas; nuevos productos y funcionalidades simples que potencien el desarrollo de los individuos y las empresas, y la incorporación de nuevas maneras de contactarse y acceder al banco 7 × 24. Vamos a adaptar la red de sucursales y los centros de banca de empresas para seguir asesorando de manera personalizada. Además, la evolución de la infraestructura tecnológica, junto con el mejor aprovechamiento de los datos y la inteligencia artificial, seguirán siendo dos factores claves para ser cada vez más relevantes para nuestros clientes en un entorno competitivo.
Iniciativas de inclusión
En el banco trabajamos para promover la inclusión a través de iniciativas que fortalezcan las capacidades financieras de la sociedad. Nuestro objetivo es promover el acceso a productos y servicios. Brindamos las herramientas necesarias para que puedan realizar una toma de decisiones financieras, conscientes y responsables. Para el 2022, desarrollaremos propuestas tanto para jóvenes como para adultos y emprendedores. Brindaremos talleres de capacitación que fortalezcan la conciencia financiera. De esta manera, continuaremos divulgando información de valor destinada a la comunidad y esperamos continuar expandiendo nuestra llegada a cada vez más personas.
