La caída de la rentabilidad de la industria del seguro este año fue ocasionada, en buena parte, por la pandemia, que desplomó las ventas. 

Las empresas de la industria aseguradora enfrentan distintos desafíos. Entre ellos, alcanzar un crecimiento sostenido de sus ingresos mientras gestionan los riesgos y reducen los costos. Un reto que se profundizó en la cuarentena por el coronavirus.

Las pérdidas relacionadas por COVID-19 en las compañías de seguros y reaseguros más grandes del mundo alcanzaron los 24.800 millones de dólares, según PeriStrat, asesora de servicios financieros con sede en Zurich, Suiza. 

A nivel local, se observa la misma tendencia. Las pérdidas fueron ocasionadas, en buena medida, por la reducción de las cobranzas y el alto nivel de anulaciones de las pólizas. También hubo una caída de las ventas.

A esta situación se le sumó la resolución del Gobierno, en abril, que consideró a la COVID-19 como una enfermedad laboral. Como tal, las aseguradoras de este ramo (las ART) están obligadas a dar cobertura a los trabajadores que la contraigan. Así, a octubre, según la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT), el sistema cubrió a más de 145.000 trabajadores, con un costo estimado en más de 6.800 millones de pesos.

La automatización, una aliada fundamental

La pandemia aceleró la digitalización en la atención al cliente, el contacto virtual con los productores, el teletrabajo y la gestión de siniestros de forma remota. 

Pero también la automatización robótica de procesos es fundamental para optimizar tareas repetitivas, tanto en materia comercial como en el área de operaciones. Un estudio de la consultora McKinsey & Company destacó que las nuevas tecnologías darán la oportunidad a las aseguradoras de mejorar su productividad y reducir gastos operativos hasta en un 40%.

Las compañías de seguros comprendieron su importancia y, pese a la coyuntura, continúan realizando inversiones en digitalización. De hecho se encuentran entre las que más automatizaciones implementaron en cuarentena. Representan el 18% del total de las empresas que se embarcaron en proyectos de este tipo, según un informe de The Eye, plataforma de automatización de procesos con inteligencia artificial (IA).

“La automatización permite liberar tiempo para que los colaboradores se enfoquen en sus tareas. Es importante que los líderes deleguen las tareas repetitivas y manuales a bots de software, en el marco de una visión estratégica y de crecimiento para sus compañías. Por otro lado, la tecnología permite acelerar la toma de decisiones, contar con datos inmediatos e innovar constantemente”, sostuvo Javier Ailbirt, CEO de TheEye, plataforma de automatización inteligente de procesos.

“Otorga la oportunidad de adecuarse a las necesidades que se presentan y definir el grado de personalización que se requiere para ganar competitividad y escalar”, agregó Ailbirt.

Por su parte, en un reporte reciente, la firma de auditoría y consultoría PwC indicó que la “automatización viene en aumento en la Argentina”. Estima que, entre el corto y el mediano plazo, se acelerará su adopción, principalmente en service delivery centers de compañías de seguros.