Por Jorge Castiñeira, presidente de La Perseverancia Seguros.

La construcción de nuestra marca es un proceso que ha evolucionado en el tiempo y está muy anclado a los 115 años de trayectoria. Somos de las pocas aseguradoras que perduraron tantos años en el mercado.

Construimos nuestro prestigio con una conducta de responsabilidad y trabajo, atendiendo a los compromisos en tiempo y forma. Nuestro nombre se construye a través de la gente que forma parte de la compañía y comparte un mismo criterio e identidad en la personalización de la atención.

Dentro de la compañía tenemos PAS que hace más de 40 años que trabajan con nosotros y les hemos transmitido la cultura. El principal mandato es responder a las necesidades de nuestros asegurados. También fuimos generando un feeling entre el productor, el asegurado y la compañía, y como resultado hoy tenemos clientes que nos eligen desde hace de muchísimos años.

La pandemia aceleró el uso de nuevos canales de atención que antes eran impensados, como las redes sociales. Tener una línea de comunicación directa en ese sentido fue muy importante y una gran transformación tanto para nuestra compañía como para el mercado en general, porque el aspecto tecnológico en seguros venía retrasado.