Por Juan Carlos Godoy, presidente de Río Uruguay Seguros.

Desde que tuvimos que cerrar nuestras oficinas en marzo nos transformamos en una empresa con identidad digital. Aunque era un proyecto que teníamos desde hace algunos años, esta nueva etapa está marcada por la tecnología. Y pese a la gran incertidumbre que generó la pandemia, tuvimos buenos resultados principalmente por la defensa de nuestro capital humano.

Nos dimos cuenta de que no necesitamos un solo metro cuadrado para seguir funcionando y logramos mantenernos en el mercado por la buena conexión con los productores asesores de seguros, que también están más preparados tecnológicamente a raíz de este contexto.

El incremento de la virtualidad ya está instalado. La digitalización tiene como fruto la agilidad y ya no podemos volver atrás porque, de otra manera, estaríamos restando calidad al cliente, que demanda una atención 360. Sin embargo, entendemos que en el interior existe un porcentaje de clientes que requieren atención personal y se seguirá manteniendo.

Además, estamos creando células expertas para estar presentes como marca en cualquier provincia para atender necesidades de los clientes en todas las agencias, pero de manera remota a través de una pantalla.