Las aseguradoras reclaman que les permitan acceder a dólares
Crece la preocupación de las compañías de seguros por la escasez de divisas para el pago de reaseguradoras internacionales. Hay pagos pendientes por más de US$300 millones.

14 Abr, 2023

En octubre de 2022 el Gobierno, a través de la AFIP, dispuso el nuevo régimen de control de importaciones denominado Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA). La nueva resolución conjunta 5271/22 establece un control férreo sobre la disponibilidad de dólares para la importación que, a su turno, afectó a las compañías de seguros en lo referido al pago de primas internacionales.

Se trata de aquellas contrataciones que las compañías locales derivan a entidades del exterior con el propósito de trasladar parte de su riesgo y cubrirse ante eventuales siniestros de envergadura que comprometan el patrimonio y la capacidad de respuesta de las propias empresas.

Para eso, claro, realizan contrataciones al exterior con empresas reaseguradoras, cuyas primas deben afrontar en divisas internacionales. El nuevo sistema impuso un régimen que, entre otros organismos, involucra a la Secretaría de Comercio a la hora de realizar los controles, pero eso vulnera el rol de contralor que ejerce la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) sobre las compañías del sector.

Para el Gobierno la medida tiene el propósito de reducir a su mínima expresión el flujo de dólares al exterior en el marco de las restricciones cambiarias, las metas de reservas impuestas por el FMI y la crisis más general del sector externo.

“No afecta sólo a las reaseguradoras sino a toda la actividad. Cuando hay un siniestro no se pueden conseguir los repuestos porque no se abren importaciones. Estamos ante un problema estructural provocado por el sobreendeudamiento y el cumplimiento de las metas del FMI.” Juan Carlos Lucio Godoy, RUS.

Para los dirigentes, la nueva normativa podría afectar su negocio a futuro, pero también el ingreso de dólares de inversores externos que, sin un marco jurídico capaz de garantizar una cobertura acorde, se verían obligados a suspender y reorientar a otros mercados. Los referentes del sector aseguran que, por lo tanto, no se trata apenas de un reclamo corporativo sino de una luz de alerta para el normal funcionamiento de la macroeconomía. Dicho de otra forma, para ellos, el remedio podría ser peor que la enfermedad.

El último día de enero de este año el conjunto de las Cámaras Aseguradoras emitieron un comunicado manifestando su preocupación por el tema y reclamando soluciones urgentes al Gobierno. A más de dos meses de ese comunicado, sin embargo, aseguran no haber logrado avances ni compromisos de parte del Gobierno.

Traslado del riesgo, herramienta clave

Gustavo Trías, director ejecutivo de la Asociación Argentina de Compañías de Seguros (AACS), detalló: “El mercado asegurador local las cede a reaseguradores aproximadamente el 10% de las primas que emite anualmente. Traslada una parte de sus riesgos que no puede asumir porque no tiene el capital. Es una dinámica que sucede globalmente porque en ningún país existe la capacidad de capital para absorber todos los riesgos. Es un mundo atomizado, sobre todo en los grandes riesgos. La primera transferencia de riesgos es el reaseguro pero luego hay más retrocesiones. Por eso un huracán en Miami se paga en todo el mundo, porque los riesgos están retrocesionados en forma global”.

Carlos Salinas, presidente de la Cámara Argentina de Reaseguradores, explicó: “Ya tenemos, más o menos desde el 15 de octubre, unos seis meses completos de retrasos en los pagos y no hay fecha cierta de cuándo se puede llegar a recuperar todo”. Salinas reconoció: “Hubo algunos pagos (en algunos momentos más que en otros) y en estas dos últimas semanas hubo algún movimiento importante pero sobre la base de un modelo discrecional. No hay disposición de qué manera se van a hacer los pagos, que es lo que nos interesa para poder informar a los reaseguradores”.

La escasez de dólares

Juan Carlos Lucio Godoy, presidente de Río Uruguay Seguros (RUS), opinó: “Esta no es una decisión de una secretaría sino de todo un gobierno. El Ministerio de Economía está tratando de lograr que los dólares se queden en casa. Pero eso no afecta sólo a las reaseguradoras sino a toda la actividad. Cuando hay un siniestro no se pueden conseguir los repuestos porque no se abren importaciones. Estamos ante un problema estructural provocado por el sobreendeudamiento y el cumplimiento de las metas del FMI. Por eso surgen los dólares soja, el dólar malbec y tantos otros. Es para que las reservas hagan sustentable la masa monetaria para que no se dispare la inflación ni el dólar paralelo. Estas son las causas y las consecuencias”.

Carlos Salinas reconoció: “Sabemos que no están las divisas o que, por lo menos, escasean. Pero no tenemos una resolución oficial de la SSN o del Ministerio de Economía que diga que esto se puede llegar a solucionar en tal fecha. La cantidad de operaciones paradas puede ser que hayan aumentado un poco, pero estimamos que son alrededor de 300 millones de dólares. Para el comercio exterior no es un dinero importante, pero cuando te faltan las monedas las contás todas”, ironizó.

Luego, continuó: «En la medida en que el retraso siga, y tomando en cuenta que estamos en abril y los contratos se renuevan en junio y julio, tenemos el problema de cómo negociamos con los reaseguradores a futuro. Llegamos a abril teniendo un retraso importante de seis o siete meses que se suman a otros atrasos por otros motivos. Entonces resulta que tenemos deudas de contratos anteriores y queremos renovar. Además, más allá del impacto de un siniestro importante que pudiera ocurrir, se suma el tema de la sequía en el agro. Todo se ha puesto más duro también para negociar renovaciones y tenemos este tema muy puntual que es que no podemos pagar”.

A la hora de analizar los impactos de la problemática, Trías afirmó: “Por un lado, hay compañías que asumieron riesgos que, en caso de un siniestro, si no pagaron el reaseguro pueden quebrar. Las compañías en cuanto se venza el plazo de pago del contrato de reaseguros es posible que salgan a anular la cobertura, porque no van a asumir un siniestro que los puede mandar a la quiebra”.

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Gustavo Trías, Carlos Salinas, Juan Carlos Lucio Godoy
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