En diciembre, los depósitos acentuaron la caída que traían en la última parte del año con una variación del – 14,1% mensual (frente a – 9,2% mensual real en noviembre). Con respecto a un año atrás la caída es del 32,1% real, según informó la consultora LCG, en base a datos del Banco Central.
Los depósitos a la vista reflejaron una pérdida del 5% mensual real. En términos anuales acumulan una baja de 17,7% real (frente a – 4,1% el mes previo).
Las colocaciones a plazo cayeron 25,4% mensual real en diciembre, la mayor desde hace 20 años. Esta retracción puede ser explicada porque las colocaciones a plazo resultan poco atractivas ante la decisión por parte del BCRA de bajar las tasas de interés combinado con una expectativa alta de inflación para diciembre. En términos anuales las colocaciones a plazo caen al 45% real.
Los plazo fijos continúan presentando una tasa de renovación baja en relación al promedio de los últimos tres años.
En contraposición, los depósitos en moneda extranjera exhibieron la suba más alta desde octubre 2016: 10,8% mensual en diciembre, el equivalente a 1.535 millones de dólares, y llegaron a los 15.800 millones de esa moneda. En noviembre, estos depósitos habían caído 1,3% mensual, y reflejaron una recuperación en diciembre.
Los plazo fijos continúan presentando una tasa de renovación baja en relación al promedio de los últimos tres años.
Tasas negativas
Actualmente la tasa de renovación es del 86%, 16 puntos porcentuales menos que el promedio. Además, es 6 puntos menor que la tasa de renovación de noviembre. Bajo un contexto de alta nominalidad, que desincentiva el manejo de dinero físico, es de esperar que para 2024 los depósitos a la vista continúen evolucionando por debajo del nivel de precios de la economía.
Con respecto a los depósitos a plazo, con el ajuste de tasas a mediados de diciembre, el BCRA ubicó en un 9% mensual la tasa de referencia, lo que generó que la tasa real sea negativa debido a las expectativas de inflación. “El BCRA dispuso la extensión de 90 a 180 días el plazo mínimo para los depósitos atados a inflación, que hoy representan apenas 0,4% del total de las colocaciones a plazo, por lo tanto, no esperamos una recuperación de estos”, sostiene LCG.
El stock de financiamiento presentó una caída de 16,9% real en diciembre, y anotó un segundo mes consecutivo de caída. En los últimos 12 meses acumula una baja del 27,1% real.
Todos los préstamos cayeron contra noviembre. Los créditos al consumo se contrajeron 16% mensual (- 30% interanual real), los préstamos personales y el financiamiento con tarjetas de crédito cayeron 19% y 15% mensual real, respectivamente. En términos anuales, acumulan caídas de 42% y 24% real, en cada caso.
Los préstamos a las empresas cayeron 17% mensual real, explicado por bajas en adelantos y documentos (- 12% y – 19% mensual real, respectivamente). En términos anuales la financiación a empresas exhibió una contracción de 20% anual real.
Los préstamos con garantía real cayeron 18% real en diciembre. Los créditos hipotecarios y prendarios exhibieron una caída de 19% y 17% mensual real cada uno. En la comparación anual se desploman al 50% y 36% real, respectivamente.
En diciembre el stock de préstamos representa apenas el 41% con respecto al nivel observado en mayo 2018 (último pico).
“No vemos para 2024 una recuperación del crédito. Con una actitud cautelosa ante el escenario de actividad moviéndose a la baja e inflación al alza, entendemos que tanto la demanda como la oferta de créditos seguirán contraídas”. concluye LCG.
