Tras el pedido de los bancos para que se habiliten otros formatos de carga de la tarjeta SUBE, Emova, la concesionaria de la red de subtes desde el 1° de diciembre de 2021, se encuentra implementando, de forma gradual, el pago a través de códigos QR interoperables.
Pronto el servicio llegará a todas las terminales automáticas de las 90 estaciones de las seis líneas del subte porteño.
“Como parte del proceso de actualización impulsado por la compañía, los más de 900.000 usuarios diarios del subte podrán utilizar todas las billeteras virtuales disponibles, que serán una alternativa más ágil, eficiente y tecnológica. Implica una renovación de software y una innovación en línea con las nuevas tendencias, que mejorará sustancialmente la experiencia”, explicó la empresa, sociedad integrada por Benito Roggio Transporte (BRT) y Metrovías.
Cómo cargar la sube con QR
Para realizar la carga, los usuarios deben dirigirse a una terminal de autogestión, escanear el QR desde su teléfono, seleccionar el monto deseado y abonar con el saldo disponible de la billetera que se elija. La pantalla mostrará un ticket como comprobante de la operación, que podrá ser fotografiado, y el dinero se acreditará al instante.
No hace falta descargar ninguna app. El código se lee como cualquier QR, desde la misma cámara del smartphone o la aplicación que se use para ello. De esa manera, esta funcionalidad permite cargar crédito de forma rápida, sin colas y sin necesidad de llevar efectivo encima.
La Asociación de Bancos de la Argentina (Adeba) solicitó, semanas atrás, la inclusión de tarjetas de débito y crédito, y de medios digitales.
La opción se habilitó luego de que los bancos pidieran que se ampliaran los métodos de pagos en el transporte público. La Asociación de Bancos de la Argentina (Adeba) solicitó, semanas atrás, la inclusión de tarjetas de débito y crédito, y de medios digitales.
Por medio de la nota titulada “Hacia la universalización de medios de pago en transporte público”, la entidad encabezada por instituciones como Banco Macro, Galicia, Comafi, Hipotecario y Supervielle , entre otras, justificó la necesidad de adaptar el sistema y mencionó que existen más de 91 millones de plásticos emitidos por servicios de débito, crédito y prepagas.
La asociación apuntó que el uso de la SUBE (que en 2022 registró 4.025 millones de transacciones, de las cuales el 85% se hicieron en colectivos, el 8% en trenes y el 6% en subtes) “complica la experiencia de usuario”, por eso pidió “alternativas complementarias para solucionar los inconvenientes que enfrentan los usuarios”, al mencionar que “con el avance tecnológico, este sistema ha quedado algo obsoleto a pesar de las constantes actualizaciones”.
Hasta ahora, las únicas posibilidades de carga virtual presentan varios pasos. Primero se debita saldo desde una cuenta bancaria (ya sea por medio del home banking o una app de banca móvil), luego hay que dirigirse a una terminal electrónica para que se acredite el monto transferido. Lo mismo ocurre con la recarga desde una fintech como Mercado Pago.
El proceso puede completarse de forma digital acercando el plástico al teléfono, sólo en dispositivos Android con tecnología NFC (sigla en inglés que alude a “comunicación de campo cercano”). Esta herramienta es compatible con la app Carga SUBE para celulares con sistema operativo Android 6 o superior. Por ahora, no está disponible para iPhone. Por eso, el universo de usuarios que quedan excluidos deben recurrir a una terminal a finalizar la carga.
Prueba piloto de SUBE Débito
En paralelo, frente a la dificultad para reponer la SUBE ante pérdidas o roturas de la tarjeta, el Banco Nación y el Ministerio de Transporte Nacional llevan adelante pruebas piloto de SUBE Débito, una Mastercard BNA que se implementará en Paraná, Entre Ríos, para abonar viajes a bordo en colectivos.
Más adelante, la idea es que se pueda pagar acercando el celular al lector de la máquina, sin plásticos. Este producto, desarrollado por la empresa Nación Servicios, tendrá una doble funcionalidad: además, podrá usarse como medio de pago para realizar compras.
En esta primera etapa, la SUBE Débito funcionará como una SUBE tradicional. En una segunda instancia, está previsto que se cargue de forma automática desde la cuenta bancaria asociada con la tarjeta de débito del BNA.
Desde la industria financiera, se busca incentivar a provincias, municipios y organismos de Gobierno a diseñar una propuesta de ley que establezca un marco normativo para el funcionamiento de los pagos del transporte público. Para ello, Adeba propone que el Banco Central, la Comisión Interbancaria para los Medios de Pago de la República Argentina (Cimpra) y las áreas de transporte trabajen en conjunto.
