Una de las tareas principales de la Fundación Avon es trabajar en la prevención del cáncer de mama. Tras varios años de experiencia recorriendo el país con un mamógrafo para dar cobertura a quienes necesitaban hacerse controles, aprendieron que dotar a las mujeres de información es la clave para llegar a tiempo al diagnóstico y al tratamiento. Empezaron a trabajar con la consigna de averiguar cuánto saben las mujeres de esta enfermedad para, a partir de ahí, diseñar estrategias de prevención más efectivas.

Para recabar información desarrollaron la Encuesta regional de opinión pública sobre el cáncer de mama en siete países de la región.

“Buscamos relevar percepciones, actitudes y niveles de conocimiento de las mujeres en relación a la enfermedad y generar datos para la toma de decisiones en materia de salud mamaria”, explicó Ana Alvarez, directora ejecutiva de la Fundación.

El eje sobre el que Avon viene trabajando es que detectado a tiempo el cáncer de mama es curable. Para que esta promesa se materialice es necesario masificar tanto la realización de mamografías como las acciones de concientización.

Llegar a tiempo

“A nivel mundial, el cáncer de mama es la mayor causa oncológica de muerte en las mujeres. Sin embargo, detectado a tiempo, es curable en más del 90% de los casos. Pero, entonces, ¿por qué aún hoy hay tantas muertes? La respuesta es clara: no estamos llegando a tiempo”, sostiene.

Para revertir esta situación salieron a averiguar qué es lo que saben las mujeres del tema.

“Ninguna mujer debería morir por no tener acceso a recursos o a información sobre el cáncer de mama. Por eso, desde 1999, impulsamos la Promesa Avon para ganarle al cáncer de mama, en dos ejes de acción: brindar información clara y accesible para promover los cuidados mamarios y brindar acceso gratuito al estudio por excelencia para la detección temprana: la mamografía”, anuncian desde la Fundación.

”Nuestra meta real era darle voz a las mujeres mismas: conocer las barreras a las que se enfrentan, escuchar sus miedos e identificar brechas de conocimiento.”

Ya en 2016 Avon había realizado la primera encuesta de opinión pública focalizada en Argentina. “Desde entonces no había nueva información sobre los niveles de conocimiento de las mujeres sobre la enfermedad, sus factores de riesgo, sus síntomas; y tampoco relevamiento de los motivos que alejan a las mujeres de los estudios, si son miedos, falta de acceso o de conocimiento”, revela.

Dado que la falta de datos es una problemática generalizada, se decidió realizar la Encuesta regional de opinión pública sobre el cáncer de mama. Se llevó a cabo en México, Colombia, Chile, Perú, Ecuador y Uruguay, lo que permitió no solo realizar un relevamiento “base” en estos países sino tener una dimensión regional y hacer análisis comparativos entre sí. ”Nuestra meta real era darle voz a las mujeres mismas: conocer las barreras a las que se enfrentan, escuchar sus miedos e identificar brechas de conocimiento”, comenta sobre los objetivos.

Fueron 7.000 las mujeres de siete países que contestaron el cuestionario y compartieron sus miedos sobre la enfermedad. La encuesta permitió ver que siete de cada diez mujeres no saben que la mamografía es el único método que permite detectar el cáncer en estadios tempranos.

A partir de los datos obtenidos en la encuesta, Avon ideó un plan integral de acciones en múltiples canales con foco en los principales hallazgos: la sobrevaloración del autoexamen mamario; el desconocimiento de la cualidad asintomática del cáncer de mama y el alto porcentaje de mujeres que no hicieron sus chequeos durante la pandemia.

Acciones para amplificar

El 30 de septiembre se dio inicio a la campaña (previo al comienzo de Octubre Rosa, el mes en el que se concentran las acciones para prevenir esta enfermedad) con un evento virtual que unió a renombrados especialistas y comunicadores de Latinoamérica para dar a conocer los resultados de la encuesta.

Se convocaron especialistas en cáncer de mama y género; instituciones de salud, hospitales y clínicas; periodistas e influencers afines al tema y líderes de opinión para que conozcan, de primera mano los alarmantes datos, y para que amplifiquen su difusión a través de redes sociales y medios de comunicación.

“A través de acciones con influencers en las redes y de entrevistas con especialistas generamos 200 publicaciones en los medios. Más de 10.000 mujeres sin cobertura médica pudieron acceder a mamografías en el mamógrafo móvil”.

Con la conducción de Dalia Gutman hicieron distintos episodios para abordar la importancia de la mamografía y el carácter complementario del autoexamen, junto con la constante mención a la cualidad asintomática del cáncer de mama en sus estadios iniciales.

“Además, queríamos que esta conversación llegará a todas las mujeres del país. Por eso creamos un press kit con las mamas como protagonistas que nos permitiera llevar los mensajes claves a las redes sociales y personas no especializadas en la temática. Enviamos 200 kits, junto con las invitaciones al evento, tanto a profesionales de la salud como a influenciadores de actualidad, salud y belleza”, indicó Alvarez.

“Brindamos mamografías en focos de alta circulación de la ciudad y los programas de los canales cubrieron la acción y difundieron información de salud. En cada nota, los voceros hicieron hincapié en la mamografía como único método de detección temprana del cáncer de mama y rompieron con los mitos y miedos que rodean al estudio”.

Vencer al miedo

La encuesta reveló que más del 80% de las argentinas tienen miedo a ser diagnosticadas de cáncer de mama. Por ello, en octubre se lanzó Tet a Tet en las redes sociales de Fundación Avon, una campaña de concientización que buscó enfrentar y aliviar los miedos a través de conversaciones humanas e inspiradoras entre profesionales de la salud, especialistas y personas que atravesaron la enfermedad.

La campaña contó con una inversión total de 6.690.001 pesos e involucró a 21 organizaciones.

“Uno de los resultados que más nos llena de orgullo es que durante el 2021, 10.410 mujeres en edad de riesgo y sin cobertura médica, de 40 localidades, de 13 provincias del país y CABA, pudieron acceder a una mamografía”, indicaron.

Muchas de estas mujeres viven en condiciones de extrema vulnerabilidad o alejadas del acceso a centros de salud. “Recorrimos barrios populares, como la Villa 31 o la 1-11-14 (CABA), visitamos siete unidades penitenciarias de Buenos Aires y acercamos este estudio a mujeres campesinas de zonas rurales de Salta, Jujuy y Chaco, entre otras”, contó Alvarez.

La meta que se propuso la Fundación Avon en cuanto a la realización de mamografías es de 8.000 anuales, y esa cantidad va creciendo un 5 o 10% todos los años.

“Empezamos a buscar alianzas en localidades porque hay lugares donde el costo de una mamografía es prohibitivo. Hoy no es un derecho. Esta encuesta marca lo lejos que estamos del derecho a la detección temprana”, resumió Alvarez.