En los últimos meses, el oro se convirtió en un instrumento de inversión en crecimiento. A nivel local, se trata de una opción que gana peso en las elecciones de los ahorristas, ya que en contextos devaluatorios e inflacionarios, como el actual, no sólo se mantiene su valor, sino que, además, se incrementa frente a alternativas más tradicionales que se encuentran limitadas.
Con un cepo que restringe el acceso al mercado cambiario y escasos vehículos de inversión disponibles, los argentinos se vuelcan cada vez más a su compra en los distintos formatos, tanto en los bancos autorizados a comercializarlo como en las joyerías más clásicas que lo ofrecen.
A nivel global también se observa una aceleración: con la incertidumbre macro mostró una tendencia alcista fuerte en el último trimestre de 2022. Su valor subió un 19% y tocó un máximo de 2.000 dólares por onza, su mayor cotización en nueve meses. Hoy se encuentra a 1.950 dólares, aproximadamente.
Tenencias de bancos centrales
Pero no sólo los particulares traccionan la demanda. El Consejo Mundial del Oro, que representa a la industria del metal precioso, informó que el año pasado los bancos centrales del mundo incorporaron a sus reservas la mayor cantidad desde 1950, cuando comenzaron los registros de esta entidad. Aunque al dólar le quedan muchos años de hegemonía, utilizan esta estrategia para generar menor dependencia de los Estados Unidos.
Según datos de organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el año pasado aumentaron sus tenencias y compraron 1.136 toneladas de este metal. Del reporte se desprende que fue el nivel más alto desde 1967 y significó un 150% más que en 2021. El fenómeno fue encabezado por fuertes apuestas de estados como China y Turquía.
«El metal físico es la mejor opción porque podría tener mayor rentabilidad a largo plazo.” Federico Glustein, economista.
“Los bancos centrales invirtieron alrededor de 70.000 millones de dólares en oro durante 2022 porque consideran que es un bien que conserva su valor en el tiempo y permite capitalizar las reservas cuando hay inflación y menor demanda de dinero”, explicó el economista Federico Glustein.
No obstante, el ranking mundial de los mayores 100 países tenedores no mostró fuertes cambios: sigue liderado por los Estados Unidos, con más de 8.133 toneladas; seguido por Alemania, con 3.355 toneladas. En tanto, la Argentina se ubica en la mitad de la tabla, con casi 62 toneladas.
Distintas alternativas de inversión
Por ello es un buen momento para invertir en oro. “Hay varias formas. Una es el metal físico, la mejor opción porque podría tener mayor rentabilidad a largo plazo”, consideró Glustein, aunque aclaró que para hacerlo líquido se debe encontrar un demandante en el momento adecuado (cuando sube la cotización) para obtener un mayor precio.
Otra alternativa más sencilla y recomendada para principiantes es apuntar a la joyería o elementos que contienen oro, dado que los bienes tangibles resultan atractivos para perfiles más conservadores. Se pueden guardar y no tienen tanta variación en el tiempo, aunque posiblemente se obtenga una menor rentabilidad.
Para inversores con más experiencia, existen los futuros de oro. Desde Grupo Broda, la economista Elena Alonso se refirió a esta propuesta más sofisticada como una operación financiera en la que se exige una garantía para operar. “Si se espera a que suba el precio del oro y se quiere resguardar el capital, se puede comprar ese activo, cuya cotización responde a las previsiones del valor del metal: si aumenta el oro, va a recibir una diferencia diaria por el movimiento del precio que tenga”, apuntó.
Para Javier Marcus, gerente de Negocios de Southern Cross, “los futuros de oro de Matba Rofex son una de las mejores alternativas para invertir en oro en la Argentina”, ya que permiten ingresar y salir en pesos en un contrato de una onza dolarizada. “No es necesario tener oro y permite realizar coberturas de riesgo a precio de oro y activos relacionados en un mercado local. Además, para especular, tiene un gran condimento: permite apalancarse más de 20 veces”, describió.
Ventajas de comprar oro
Entre las instituciones financieras de la Argentina, Banco Piano tiene una amplia trayectoria en la venta de oro como activo de inversión. Ofrece barras y monedas, entre las que se destacan las barras cuádruple 9, con un nivel de pureza de 999,9, conocidas también como good delivery (de buena entrega). La de 5 gramos arranca en 350 dólares. Se entregan con un certificado de autenticidad con su correspondiente número de serie.
“Estas son las más sugeridas por su nivel de liquidez en el mercado internacional. Se trata de un segmento más chico, lógicamente, que el del dólar, pero que crece sostenidamente. Antes estaba más restringido a inversores calificados. Ahora se ha ido masificando. Hay mucho interés por parte de jóvenes. No hay que ser gran conocedor para invertir y es sencillo hacerlo. Cuando el ahorrista se acerca a comprar, le abrimos una caja de ahorro en divisa norteamericana de forma gratuita”, detalló Leonardo Echegoyen, director de Banco Piano.